viernes, 9 de marzo de 2018

SON OTROS LÓPEZ

De verdad no quieren agregarle gasolina al fósforo, porque parece todo lo contrario lo que buscan los adversarios de Andrés Manuel López Obrador.
Muestran desprecio y actúan con dejos racistas al mencionar al candidato presidencial de MORENA, esperando exasperarlo y provocar una respuesta virulenta, como las que ha manifestado en algunas otras ocasiones.
La forma en que actúan el ex Presidente Vicente Fox, Enrique Ochoa y otros personajes intenta ser con sorna, aunque el efecto esperado no resulta y por el contrario genera indignación por parte de la ciudadanía.
Y es que el primer apellido del candidato presidencial de MORENA se les indigesta, tal vez porque el primero del ex Presidente no es demasiado común en México, pero si en el extranjero, pero el del dirigente nacional priista es un poco menos común que el López.
En el caso de Ochoa Reza minimiza al candidato presidencial, mencionando solo uno de sus dos apellidos, olvidando que la ciudadanía lo reconoce por los dos.
Es decir mencionado solamente a López, como lo hace, el efecto deseado no es el esperado, porque no se sabe a quién se refiere, ya que el tabasqueño es conocido como AMLO, López Obrador o hasta el Peje.
Resulta curioso que los priistas quieran vender a su candidato como Pepe “Mid” y traten a los adversarios con desprecio. A uno le dicen López y al otro “Dos Caras” y el respeto, donde queda.
Claro que hay estrategas que buscan responder de la misma forma y endilgarle el sobrenombre del payasito que circula en las redes al candidato priista, recurriendo a la misma fórmula.
Y es que el propio candidato del PRI, José Antonio Meade Kuribreña se refiere a su contendiente de MORENA como López Obrador.
Explica el mencionado Pepe “Mid” hace un par de semanas que esperan un desbarre fuerte del candidato puntero, tal y como sucedió hace doce años con su expresión de “Cállate Chachalaca” al referirse a la continua intromisión del entonces Presidente Fox en las campañas electorales, pero que el efecto no era el deseado.
Le contabilizamos una decena de ellos, dijo “Mid”, entre los que ubicó lo de Presidente huachicolero, se lanzó en contra de la Corte, contra los militares y ejemplificó otros más, pero ninguno con el impacto suficiente para repercutir negativamente en su campaña.
Por eso, la estrategia apunta hacia el intento por sacarlo de sus casillas, para lo que habrán de recurrir a todo tipo de estratagemas.
Sin embargo, lo de Vicente Fox es patético, un ex Presidente de la República que no se distinguió nunca por ser sensato, que su locuacidad estuvo de manifiesto siempre y que se presentó como el salvador de la Patria y ofreció que resolvería los problemas del país en cuanto asumiera el gobierno, reaparece en la escena pública para lanzar sus dardos venosos contra el candidato de MORENA.
Fox considera a AMLO como un Mesías y un falso profeta, cuando él mismo lo fue, vendiéndose como un producto y no como un político o estadista.
Catalogado por algunos como mesiánico, el hombre de las botas, aquel que le chiflaba a su mujer para que lo obedeciera, asegura que México no necesita Mesías.
Se refiera a López Obrador como Lopitoz, tal vez tratando de emular al personaje que era conocido con ese sobrenombre en el Acapulco de los 60 y que encabezaba a los reclamantes de tierras y que fuese asesinado.
Alfredo López Cisneros, líder de los precaristas y padre del ex alcalde de Acapulco, Alberto López Rosas, fue conocido como el Rey Lopitos y asesinado en 1966, aunque tal vez la escasa cultura de Fox Quesada no le permita ubicar a este legendario personaje del Guerrero salvaje.
Lejos están López Cisneros y López Obrador de tener alguna similitud.
Y es entonces cuando se preguntan algunos si la tónica del golpeteo contra AMLO será la misma, recurriendo a estos personajes de la picaresca política mexicana, catalogados algunos como infortunio de la pesada lápida que le ha tocado cargar al país en materia política.
Y es que los López, como ubica Ochoa Reza al candidato de MORENA, son parte de la tragedia nacional.
López de Santa Anna, fue parte fundamental para que México cediera la mitad de su territorio a Estados Unidos, aunque provocado por guerras perdidas, la de Texas y la invasión del 47, donde los territorios de la Alta California, Arizona, Colorado, Utah, Nevada, Nuevo México y otros más pasarán a manos de la Unión Americana que creció en forma vertiginosa.
Adolfo López Mateos es el segundo Presidente de México en llevar como primer apellido el López y su herencia es dentro de los Ejecutivos mexicanos de las mejores, aunque en su gobierno se reprimieron varios movimientos sindicalista, como el de los ferrocarrileros, maestros, y médico, entre otros. Su filiación era priista.
José López Portillo y Pacheco, dejó el país en una de las peores crisis de la historia, donde no supo administrar la riqueza petrolera, ni defender el peso como perro. Él a diferencia de López de Santa Ana, si era priista.
Es cierto el balance de los López no ha sido el mejor, ni siquiera cuando el PRI era partido hegemónico y es, tal vez, esa la fobia y el escozor que les provoca a quienes usan el apellido como parte de la degradación y el intentar frenar la carrera electoral a quien hasta ahora encabeza las preferencias ciudadanas.
Vale la pena esperar si la reacción e López Obrador a este golpeteo es de acuerdo a lo que ellos quieren o como decía el mítico Kalimán, serenidad y paciencia mi pequeño Solín.

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