CAÍDA LIBRE

Con qué votos piensa ganar Josefina se preguntan algunos, viendo la caída libre en que va la panista en el ánimo ciudadano.

Y es que resulta curioso ver el descenso en las preferencias electorales del partido gobernante, especialmente en aquellos estados que, en elección concurrente, optarán por sus nuevos gobernantes.

Son siete las entidades en las que el primero de julio se elegirán a los nuevos gobernantes, de las que en tres de ellas gobierna Acción Nacional y lo hace desde hace cuando menos dos sexenios.

Guanajuato, Jalisco y Morelos, son las perlas panistas de estos comicios, en los que respectivamente gobierna desde 1991, 1995 y 2000, logrando conservar los Ejecutivos estatales en comicios consecutivos.

Con excepción de Guanajuato, en los otros dos estados, los ciudadanos  parecen haber llegado al límite de su confianza con el partido blanquiazul y han sido relegados hasta un distante tercer lugar en las encuestas recientes.

Guanajuato sigue conservándose como la joya de la corona, aunque la competencia se cierra cada vez más entre los candidatos del PAN y el del PRI.

Es cierto que Miguel Márquez continúa en la punta, pero lo sigue de cerca el priista Juan Ignacio Torres Landa, quien compite por segunda ocasión y espera concretar una sorpresa, basado en el efecto Peña, que también tiende a disminuir en todo el país.

Por el contrario Márquez es visto como el que podría aportar votos para Jose y no a la inversa como lo ven los priistas en el caso de su candidato.

Los otros dos estados gobernados por el PAN tiene historias diferentes a la de Guanajuato, ya que tanto en Jalisco como en Morelos se da por descontado que gobernará un partido ajeno al que se encuentra actualmente en el poder.

Jalisco es el cuarto estado más poblado del país, por lo que su aportación de sufragios es sumamente importante y contribuye en gran parte al volumen del candidato presidencial del partido ganador en la elección estatal.

Sin embargo, en el caso del estado del occidente, Acción Nacional fue desplazado de la competencia y marginado a un tercer lugar, mostrando el hastío de los ciudadanos del estado por los gobiernos emanados de este partido.

El priista Jorge Aristóteles Sandoval salió como favorito para ganar la elección estatal y se mantiene en esa tesitura, con  la variante de que la disputa se esperaba se centraría entre el priista y el candidato del PAN, Fernando Pérez Guzmán, aunque los números revelan otra cosa.

Sorpresivamente el crecimiento del candidato del Movimiento Ciudadano, Enrique Alfaro, logró rebasar por varios puntos al panista, al que se le pide ceder su candidatura y sumarse al crecimiento del candidato de la izquierda que no va respaldado por el PRD.

Morelos registra un suceso similar, ya que siendo el PAN el partido gobernante, su candidato al gobierno estatal, Adrián Rivera Pérez, se ubica en tercer lugar de las preferencias electorales.

La lucha se centra en el priista Amado Orihuela Trejo y el perredista Graco Ramírez Garrido, en una final que se antoja será sumamente disputada y donde el segundo muestra el mayor índice de crecimiento.

Pero si en dos de los tres estados que gobierna el PAN ha sido relegado hasta el tercer sitio de las encuestas, en los restantes su situación es todavía peor.

El Distrito Federal representa el mayor número de electores de las siete entidades que elegirán gobernante el primero de julio.

La candidata del PAN es Isabel Miranda, quien ni siquiera es militante del partido y lejos está de entusiasmar a la ciudadanía, que la ubica en otro tercer lugar, pero con una baja puntuación menor al 15 por ciento.

El candidato del PRD, Miguel Ángel Mancera aventaja por mucho a los otros aspirantes y la priista Beatriz Paredes Rangel se ubica en segundo lugar a más de cuarenta puntos de distancia del puntero.

Tabasco muestra números todavía peores para los candidatos del PAN, con todo y que su candidato a gobernador es bien visto por los electores.

Gerardo Priego Tapia se sitúa en tercer lugar, detrás del priista Jesús Alí de la Torre y el perredista Arturo Núñez Jiménez, considerándose nulas las posibilidades de ganar y ni siquiera rebasar el tope del 10 por ciento de los votos emitidos.

Yucatán es una entidad que en el pasado ganó Acción Nacional (año dos mil con el efecto Fox) y ahora a su candidato se le conceden pocas posibilidades de triunfo.

Joaquín Díaz Mena ya gobernó Mérida, fue diputado local y federal y con todo y ello no logra conseguir el respaldo ciudadano que requiere para alcanzar en las preferencias electorales al priista Rolando Zapata Bello.

En la entidad peninsular el PAN si es segundo lugar, pero lejos de los números del priista, partido que se considera mantendrá el gobierno estatal.

Chiapas es otro estado en que el PAN se fue hasta el tercer lugar de las preferencias electorales, del que difícilmente podría salir, según se considera en las encuestas.

El PRI podría recuperar ese estado, por la vía de su alianza con el Partido Verde, mientras que el PRD que gobierna desde hace dos sexenios se encamina a perder la entidad con una candidata que hasta hace pocas semanas militaba en el PRI.

Como en otros estados, Acción Nacional está lejano del puntero y lejos de la contienda por el gobierno estatal.

Con ese panorama en los estados que elegirán gobernantes, las posibilidades de Jose por ganar la elección presidencial decrecen.